El título de la entrada hace referencia a cómo tengo los pies: ardiendo de tanto caminar con zapatos malos. Creo que en tres días he caminado 40 kilómetros y no va de broma en absoluto, pero me gusta, creo que de una forma un poco sadomasoquista por el amor que tenía hacia esta ciudad y no deja de crecer.
Como estoy un poco cansada voy a resumir en la medida de lo posible y también que las fotos hablen por sí mismas.
Estoy pasando unos días muy genialísimos con Fina sin parar de caminar y de ver tiendas y por supuesto muchos chicos guapos (especialmente en las tiendas).
El martes vi al chico más guapo que había visto en mi vida, tenía una cara como un ángel con pecas y iba vestido de traje, lo cual me ponía mucho porque probablemente es un economista psicópata, y llevaba una bolsa del gimnasio de tommy, nos ayudó cuando le pedimos direcciones y nos sonrió y fue muy simpático, siguió caminando por delante nuestro, oyó como nos reíamos nerviosas como teens que somos y se giró y nos pilló de pleno y entonces caminó un poco más deprisa y nosotras nos deprimimos porque pensábamos que íbamos a crearle complejo de inferioridad si se pensaba que nos estábamos riendo de él (¡NO! estábamos llorando por el impacto de su belleza) y quedamos impactadas para el resto de la velada. Al día siguiente, el miércoles, conocí a otro que le reemplazó como el chico más guapo que he visto en mi vida, era su primer día como dependiente de Topshop y una compañera suya nos dijo que no era modelo. No voy a describirlo porque me voy a poner a llorar sólo de pensarlo, sólo diré que probablemente era una mezcla de dios nórdico con ascendencia asiática, pero algún día volveré para pedirle si puedo hacerle una foto para mi proyecto londinense analógico en blanco y negro y cuando revele ese carrete mágico ya entenderéis de lo que hablo.
Ese día estuvimos por el distrito financiero y veíamos a los chicos con traje y nos daba la risa nerviosa floja que ya he comentado. Me encanta estar con Fina porque es una de las pocas personas tan hormonadas como yo que me comprende y siempre podemos tener la guardia baja y ser nosotras mismas (cómo me gusta poder volver a sentirme así). Si existiera una versión física de Rookie creo que la leeríamos juntas religiosamente sentadas en el césped. Enfrente de la Tate Modern.
Me encantan las formas inglesas, su educación y cómo siempre dejan pasar y piden perdón por todo, lo cuidadas que están todas las calles y lo únicas que son todas las tiendas y los restaurantes. Haría fotos a todo para que toda la belleza pudiera durar eternamente. Me gusta muchísimo que la gente sean individuos, no sé muy bien cómo explicarlo. Yo siempre me he sentido muy "individual" y en España la gente tiende a agruparse en pandillas o parejas y eso me pone un poco incómoda porque mi percepción como individuo es muy fuerte, pero veo que aquí la mayoría de la gente es así y me gusta mucho.
Esta tarde he caminado mucho sola y también he comprado por fin una tarjeta SIM inglesa, me han regalado un móvil con ella que es como una blackberry pero más pequeñita y de vodafone. Están muy locos con lo de los móviles estos ingleses. El caso es que me ha atendido una chica negra que se llamaba Jasmine, era una londinense muy simpática pero tenía un acentaco que no le entendía casi nada y me tenía que repetir las cosas dos veces. Me ha hecho recorrerme 500 metros hasta el Pret más cercano porque necesitaba wifi y no se sabía la clave de la wifi de su propia tienda. El móvil no funcionaba pero al final han sonado en la radio Bloc Party, y yo le he dicho "now Bloc Party is playing we're going to have luck", y EFECTIVAMENTE gracias al poder de Hinting for Witches de Bloc Party, después de estar 40 minutos intentándolo, mi móvil ha querido aceptar la tarjeta inglesa. Me ha dado miedo y todo. Luego he ido a HMV para ofrecer pornografía cultural a mis ojos, había un dependiente muy guapo con barba que me miraba mucho pero al final he ido a que me atendiera un clon de Dougie Poynter versión hardcoreta light, me ha preguntado qué tal estaba de una forma rara y ha sabido que no era de aquí y me ha empezado a dar conversación, vamos que además de tener un trabajo guay y ser guapísimo es muy majo. No sé si me voy a acostumbrar a que existan personas así y hablen conmigo, me siento como si estuviera en una tienda en el más allá y además de mirar me dejan tocar (o algo así).
Hablando de eso, he escrito a Mr. T, que ya me había escrito preguntando si había llegado, y las últimas noticias que puedo dar es que esta noche me dijo que estaba por mi zona en una fiesta de su trabajo y yo me he autoinvitado rechazando la invitación a la vez, y acto seguido él me ha tenido que aclarar que no me estaba invitando a la fiesta. He empezado muy bien todo esto, en mi línea de ridículo espantoso nivel 7.
Con todo dicho, aquí están algunas de las cosas que me he ido encontrando en estos días...
Sí, he comido sushi y he roto mi VEGxEDGE y ha sido el mejor que he probado en mi vida.
Creo que el último día que esté aquí iré corriendo a Topshop y compraré ese maldito abrigo...
Ayer tuve el placer de estar en la universidad de ciencias más prestigiosa del mundo (el Imperial, que además tienen un sello para entrar con un triángulo que yo creo que como poco es masónico) viendo el partido de España, y me emocioné y todo, qué vergüenza propia pero bueno. Los nerds muy guapos todos, y el sitio precioso.
Dislexia siendo disléxica: "AHÍ HAY UN TOILET, AHÍIIIIIIII". Tuve que hacer una foto para sonreír cada vez que la veo :-)
Había cien mil libros y revistas interesantes en la Tate Modern, me compré uno de ellos que se llama Cult-ure, pero tenía que hacer una foto a esta preciosidad que pesaba como 3 kg.
Hemos pensado que estarían haciendo una performance porque era demasiado meme para ser verdad. En la parte delantera de sus bicicletas tenían unas banderitas-carteles que ponían JESUS, y gritaban "no passport, no life".
Este señor es una persona maravillosa que ha enseñado a su gato a hacer cosas y ha escrito un libro y los dos piden dinero en Covent Garden. Hoy el gatete estaba estresado porque hacía mucho calor y cuando la gente lo tocaba empezaba a bufar pero con su amo era muy simpático, les he dado un pound y he hablado con el chico porque además le ha gustado mucho mi vestido de cortes de carne. Es una pena que no se lea el título del libro, por lo visto ha vendido muchísimos ejemplares.
He ido a Camden al Whole Foods y he estado mirando como media hora toda la microtienda para al final llevarme esto. Especial mención a los CACAHUETES CUBIERTOS DE WASABI y los MAC N CHEESE DE ARROZ CON QUESO VEGANO precocinados.
Buenas noches a todas y todos.
thoughtful/thoughtless iphone existence & other bits
6/28/12
6/25/12
London, my love
Creo que es bueno recuperar este blog en parte como tener un espacio para "hablar con alguien" y contarle lo que estoy viendo y que las personas que tengo lejos podáis saber de mí.
Cuando el avión sobrevolaba la ciudad se me ha escapado una lagrimita, por fin es verdad. Vuelvo al hogar que me estaba esperando.
Me ha recogido una mujer muy interesante que es portuguesa de corazón pero lleva más de 20 años en Londres y conduce un taxi privado. Hemos hablado de muchas cosas y tenía una mentalidad muy optimista, justo lo que necesitaba para recibirme.
He entrado en la residencia donde estoy alojada y es un edificio muy imponente, moderno, gigante y con muchas ventanas. La recepcionista no ha sido demasiado simpática al hacer check in, y he tenido que rellenar un millón de formularios siguiendo un estricto control británico. Mi habitación no es tan SUPERSUPER como el precio que cuesta, pero el 9 de julio me mueven a una de discapacitados porque era lo único que les quedaba y tengo más expectativas con esa...
He salido a intentar hacer la compra para tener comida y cosas con las que ducharme, etc. y me he topado de bruces con la realidad londinense del ritmo rapidísimo al caminar, tener que esquivar a la gente, que te miren a los ojos sin verguenza, perderse en espacios gigantescos... esta es una de las cosas que más me gusta de esta ciudad, pero aún me queda algo de tiempo para acostumbrarme. Una de las estaciones más importantes de Londres, en hora punta de salida del trabajo, puede que no haya sido la mejor elección para conocer el barrio o hacer la compra.
No viene a cuento pero como soy yo y ya nos conocemos todos voy a decir que si me dieran 1 pound por cada feo que he visto sólo tendría 1 pound. Sólo he estado como una hora fuera de la residencia y ya me he enamorado setenta veces. Probablemente mi bolso de Factory Records ha ahuyentado a algunos guapos pero también ha atraído a otros, JAJA. Qué guapos son los ingleses, joder. Encima rubios. Y con pelo bien cortado. Y visten como a mí me gusta. Y llevan zapatos preciosos. En fin. Con todo ese festival de buenorros y esto que ya he dicho de que era hora punta, pues al final he acabado gastándome 30 pounds en comida en TESCO cogiendo todo lo que quería y sin prestar atención a la lista. Delante de mí en la cola había un viejecito que compraba sólo cosas baratas: té instantáneo, beans, hamburguesas, chocolate blanco y no sé qué más, todo de marca blanca Tesco. Tenía unas galletas de té sabor toffee muy graciosas, todo lo graciosas que puedan ser unas galletas de té, y me ha recordado a España, no sé si es porque todos los abuelitos son universales. El caso es que entre pitos y flautas me ha quedado una compra tal que así, con el ticket sorpresa:
Y he venido y me he conectado a Skype con los altavoces sonando bajito, debería deshacer la maleta, cambiar las sábanas y poner las mías, empezar a ver cómo voy a quedar mañana con mi preciosa amiga F, cómo voy a coger el bus y comprarme una Oystercard, qué me hago de cenar, qué voy a hacer estos días... BRRRR.
Pero bueno, qué preciosa que es Londres y cuánto la quiero, lasidfjhsjfaklsdjm.
Gracias a quienes habéis hecho posible que esté aquí por que pueda repetir esta experiencia. Aunque haya gente que ha sido fundamental para poder hacerlo y no podrá leerlo, os quiero muchísimo a todos y lo estoy disfrutando ya :-) pero espero disfrutarlo más cuando compre papel higiénico y una alfombra de baño y esas cosas que me hacen falta y no he comprado, je je je.
Grüß Gott!!!!
Cuando el avión sobrevolaba la ciudad se me ha escapado una lagrimita, por fin es verdad. Vuelvo al hogar que me estaba esperando.
Me ha recogido una mujer muy interesante que es portuguesa de corazón pero lleva más de 20 años en Londres y conduce un taxi privado. Hemos hablado de muchas cosas y tenía una mentalidad muy optimista, justo lo que necesitaba para recibirme.
He entrado en la residencia donde estoy alojada y es un edificio muy imponente, moderno, gigante y con muchas ventanas. La recepcionista no ha sido demasiado simpática al hacer check in, y he tenido que rellenar un millón de formularios siguiendo un estricto control británico. Mi habitación no es tan SUPERSUPER como el precio que cuesta, pero el 9 de julio me mueven a una de discapacitados porque era lo único que les quedaba y tengo más expectativas con esa...
He salido a intentar hacer la compra para tener comida y cosas con las que ducharme, etc. y me he topado de bruces con la realidad londinense del ritmo rapidísimo al caminar, tener que esquivar a la gente, que te miren a los ojos sin verguenza, perderse en espacios gigantescos... esta es una de las cosas que más me gusta de esta ciudad, pero aún me queda algo de tiempo para acostumbrarme. Una de las estaciones más importantes de Londres, en hora punta de salida del trabajo, puede que no haya sido la mejor elección para conocer el barrio o hacer la compra.
No viene a cuento pero como soy yo y ya nos conocemos todos voy a decir que si me dieran 1 pound por cada feo que he visto sólo tendría 1 pound. Sólo he estado como una hora fuera de la residencia y ya me he enamorado setenta veces. Probablemente mi bolso de Factory Records ha ahuyentado a algunos guapos pero también ha atraído a otros, JAJA. Qué guapos son los ingleses, joder. Encima rubios. Y con pelo bien cortado. Y visten como a mí me gusta. Y llevan zapatos preciosos. En fin. Con todo ese festival de buenorros y esto que ya he dicho de que era hora punta, pues al final he acabado gastándome 30 pounds en comida en TESCO cogiendo todo lo que quería y sin prestar atención a la lista. Delante de mí en la cola había un viejecito que compraba sólo cosas baratas: té instantáneo, beans, hamburguesas, chocolate blanco y no sé qué más, todo de marca blanca Tesco. Tenía unas galletas de té sabor toffee muy graciosas, todo lo graciosas que puedan ser unas galletas de té, y me ha recordado a España, no sé si es porque todos los abuelitos son universales. El caso es que entre pitos y flautas me ha quedado una compra tal que así, con el ticket sorpresa:
Y he venido y me he conectado a Skype con los altavoces sonando bajito, debería deshacer la maleta, cambiar las sábanas y poner las mías, empezar a ver cómo voy a quedar mañana con mi preciosa amiga F, cómo voy a coger el bus y comprarme una Oystercard, qué me hago de cenar, qué voy a hacer estos días... BRRRR.
Pero bueno, qué preciosa que es Londres y cuánto la quiero, lasidfjhsjfaklsdjm.
Gracias a quienes habéis hecho posible que esté aquí por que pueda repetir esta experiencia. Aunque haya gente que ha sido fundamental para poder hacerlo y no podrá leerlo, os quiero muchísimo a todos y lo estoy disfrutando ya :-) pero espero disfrutarlo más cuando compre papel higiénico y una alfombra de baño y esas cosas que me hacen falta y no he comprado, je je je.
Grüß Gott!!!!
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