12. 21

Empezó conmigo incómoda porque no quería bailar con negros y acomodándome con un nórdico con pecas en brazos perfectos que bailaba muy bien. Con tiempo de calidad junto a la mujer bella ahora sin frenillo. Con Robert Pattinson sin camiseta siendo penetrado analmente. Con fiestas de "chicas" a las que le gusta comer, beber, abrazarse y gritar con porno bizarro. Con casualidades (cómo no) y el chico con pecas en los brazos bailando muy bien otro tipo de música e instruyendo a una servidora patosa. Hablar mucho en inglés. Un tipo se tira desde el espacio. Viaje a Tokio confirmado. Casi aparecer vestidas iguales. El regreso de una persona muy querida, ahora bien acompañada, y una sesión intensiva de vino y cerveza durante tres días sucesivos. Hablar mucho en inglés. Call me maybe. Tijeras. Aprovechar el momento. Ser mellizos. Cielo gris. Ponerse las pilas. Cursos audiovisuales. Lluvia. Aparecer vestidas iguales. Electrónica de la que se toca de pie y se escucha sentada. Hablar mucho en inglés. Otro nórdico con pecas en brazos perfectos que bailaba muy bien y tenía un alma excesivamente atormentada. Las Cachondas dándolo todo. Domingo de resaca física y comida caliente. Midnight City y Girlfriend en repeat con tristeza. Siempre son iguales y siempre desaparecen lejos. Esta semana no le va a llegar ni a la suela del zapato.

981 Heritage

Una visita bastante diferente de mi última a la capital. Exprés y expresamente. Fui al Heritage para ver a uno de mis grupos favoritos y en mi humilde opinión, unas mentes brillantes de la electrónica que se hace ahora, Hype Williams. Tuve muchísima suerte de identificar a Inga Copeland tomando el sol, aislada y con su característica gorra Nike, y pude acercarme después a intercambiar palabras brevemente. Lo mismo sucedió con la otra mitad del grupo, Dean Blunt, al que también vi más tarde. No me dejó que le hiciera una foto, dijo "I don't do pictures", "You can take a picture of my wrist or my shoes". Así que hice una foto de nuestros pies. Yo estaba muy enamorada de ellos y ojalá me acepten algún día en su secta. Ambos estaban solos todo el tiempo y vestían de riguroso negro. No vi a nadie que les reconociera además de mí, así que espero que pudieran sentirse especiales por saber que al menos había una persona realmente emocionada de que estuvieran ahí. Parecían bastante enfadados con la crew del evento y la mala leche era recíproca. En cualquier caso, dieron un concierto genial, con mucho más "analógico" y ruido del que me esperaba, y la cantidad de distorsión lo-fi y samples que sí esperaba. Después del festival estuve en la antigua calle donde vivía H., volví a su portal y los pomos-caballos habían desaparecido, me puso muy triste porque les tenía mucho aprecio, era una certeza que incluso Tim recordaba. En cualquier caso, fue un fin de semana genial y el concierto fue la actuación más inspiradora que he visto este año. Paz y amor.